Me desperté a las 5am ese día, tenía que ir con mi hermana al campo de futbol donde nos veríamos con mi padre. Mi madre y él están divorciados hace mucho y ahora los fines de semana tenemos que hacer cosas con papá; esta vez seria ver a los chicos del colegio jugar, luego del mediodía, iríamos al centro comercial a comer algo y con suerte, papá nos compraría ropa.
A mí me emociona mucho la idea de ver a mis amigos jugando futbol, pero a mi hermana no mucho, su parte favorita es el centro comercial; ahí solo mira ropa, no para de pedir zapatos y vestidos que mi padre promete comprar pero que ambos sabemos que no siempre será así. Aunque en cierto modo, la rutina de una vez cada dos semanas, nos sienta bien para no perder la costumbre de estar con nuestro padre.
Mi hermana es dos años mayor que yo, ella parece un poco extraña, ya que algunas veces está de buen ánimo conmigo y otras parece que no quiere saber nada de mí; yo no la molesto mucho a menos que ella entre a mi habitación y me pida hacer algo con ella. De otra forma, me mantengo alejado y sobre todo, no toco sus cosas.
Y ese día, fue uno de esos días en los que ella estaba muy amigable conmigo. Luego de lavarme los dientes, escucho ruidos en la casa, sabía que mamá aun dormía y asumí que era mi hermana quien venía al baño para usarlo. Solo tenemos dos, uno en el cuarto de mamá y el otro está en el pasillo donde mi hermana y yo tenemos que turnarnos para poder usarlo. Pero esta vez no me saco a la fuerza como hacía algunas otras veces.
Mientras yo me secaba la cara, ella entro con su toalla en la mano y luego de sentarse en el váter y hacer pipí, sujeta mi pijama y empieza a moverme como una especie de juego. Luego me soltó y sin levantarse del lavado, se quitó la parte de abajo de su pijama, se levantó y empujándome un poco hacia dentro del baño, cerró la puerta. Yo no sabía que iba a hacer, aunque algunas veces me llega a gritar, nunca me ha maltratado físicamente, aunque puede hacerlo porque más grande que yo.
Pero luego de cerrar la puerta, se quita la parte de arriba de su pijama y completamente desnuda me pide que me quite la ropa para ducharnos. Estaba viendo a mi hermana desnuda y estaba un poco nervioso, pero hice lo que ella me dijo y me metí a la ducha con ella sin saber lo que iba a pasar. Aunque ella también estaba desnuda, yo sentía un poco de vergüenza, hace mucho que no quería que mamá me viera desnudo por vergüenza y ahora estaba junto a mi hermana en la ducha.
Luego de mojarnos un poco, ella toma el jabón y empieza a frotarlo en mi cara con fuerza mientras reía, yo con mis manos intentaba quitarlo mientras luchaba con ella para meterme debajo de la regadera para que el agua limpiara mis ojos y no me llegara a picar. Pero en ese momento de intentar colarme, agarre sus tetas y ella con sus manos, me sostuvo debajo de la regadera para que el agua limpiara todo el jabón que había echado sobre mi rostro.
Yo solo restregaba mis manos contra mi cara para quitar todo el jabón y ella seguía echándolo sobre mi cuerpo, pero no se detuvo en mi barriga, siguió hacia abajo y agarro mi polla jalándola con jabón en sus manos y rápidamente se me puso dura. Yo no podía aguantar las cosquillas que sentía, cerré los ojos porque sentía mucha vergüenza y ella seguía tocando y jalando mi polla con las dos manos. Todo paso muy rápido y además de vergüenza, sentía mucha excitación.
Con una de sus manos, tomo la mía y la llevo hacia una de sus tetas, se apretaba con mi mano y en un instante que pude abrir mis ojos, vi como ella se reía. Sentía que se estaba burlando de mí pero quería que siguiera jalando mi polla. Ella no dejaba de hacerlo y rápidamente empecé a sentir como muchas cosquillas recorrían desde mi espalda mientras mi hermana me seguía hacia una paja. Ahí mismo me corrí muy en sus manos y ella no paraba de reír.
